Jesús nos llama a nuevas posibilidades en la temporada de Adviento. Sin duda, ya es hora reconstruir nuestras esperanzas y relaciones, acercándonos cada vez más a ser la comunidad amada. Con ojos bien abiertos, miremos el nuevo mundo inclusivo que se está creando, conectado con las palabras amorosas de nuestro Señor y salvador que nos instruye quedarnos atentos. Con el amor como la piedra angular del trabajo de reconstrucción, podemos realizar la meta. No es hora de dormir, porque como Jesús dice,“